Pretextos

Catarsis
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Prólogo
El gato
Mi primer amor
Amor eterno
El de la suerte
Oración
Para toda la vida
Un milagro
Tortura
Diez minutos sin ella
Uno de tantos
Pienso en ti
Te extraño
Olvidar a Gloria
Por siempre jamás
Terca necedad
La huida
Sólo imaginaba
Preguntas tontas
Dos o tres heridas
La manifestación
La creación
Mil millas
Catarsis
Pretextos
Segundo lugar
De memoria y olvido
Entre príncipes
A veces pienso en ti
No vale la pena
Historia de fantasmas
Acorde al ritmo
Epitafio
¿Quién soy?
Identidad

Pretextos, de José Galván Rivas

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                              CATARSIS

 

–¡Eco!

            –...eco, eco, eco... –respondió el universo. Guardé silencio y todo fue tranquilidad. O, ¿acaso era la represión que caía sobre la tempestad? La luna, muy tenue, se reía de mí. En medio de la soledad, pensé que la injusticia divina existía y yo estaba a su merced.

            –Muerte –supliqué al mar–, necesito un poco de calma.

            La guerra continuaba. Mi alma y yo. ¿Cómo lograr un puente de salvación, cómo terminar de una vez? Había sido tan firme como un roble, ningún espectro me conmovió. Sólo ella, una mujer.

            El viento silbó una música de libertad. En mi mente todo estaba oscuro. Imposible hallar una tabla de salvación. Su majestad el caos reina sobre este pobre ser, generoso ladrón sin propiedad alguna.

            Una mujer... Quizá el jardín del edén no era para mí. En ese instante la niebla impedía ver un árbol a dos pasos y yo buscaba una mariposa en la distancia. ¿Se puede nacer por segunda vez, dar vuelta al reloj de arena? ¿Existió el amor? No, sólo un instinto animal.

            –Muerte... –supliqué por enésima vez. Los cuatro vientos ululaban sin traer respuesta. Gotas de sudor perlaron mi frente. Podría estar en la tranquilidad de mi lecho, en cambio, de cada ojo surgían lágrimas intermitentes. ¿De qué madera estoy hecho? Necesitaría verme en un espejo y ni así lo sabría.

            –Quiero descansar en un valle, al final del arco iris, y ser tema de la poesía.

            –...muerte, muerte, muerte... –respondió el mar, mientras caía en el abismo y mi ser, indivisible, amenazaba con romper la luna en mil reflejos.

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Pretextos de José Galván Rivas
(C) 1999, José Galván Rivas
Nicolás Romero, Estado de México